Aunque algunos indicadores de la economía y en particular del consumo frenaron su caída y en algunos casos comenzaron a recuperarse, en lo referido a la venta de leche y derivados, productos sensibles para el consumo masivo, en el mercado interno la caída no paró.
Según datos de OCLA, el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, en el mes de septiembre de 2024 se vendió un volumen 7,3% inferior al mes de agosto, con una caída en litros de leche equivalente 5,3%. En tanto en la comparación interanual versus el mismo mes de 2023, la disminución en volumen es del 3,5% y del 12,7% en litros de leche equivalentes.
En el acumulado del período enero-septiembre del 2024 la caída es del 12,2% en volumen de productos y del 11,1% en litros de leche equivalentes.


En el desagregado de productos muestra que la caída afectó a todos los sub rubros de productos lácteos, aunque afectó particularmente a algunos no esenciales. La estadística de los primeros nueve meses del año muestra que hubo bajas del 40,9% en la venta de leches chocolatadas, del 53,2% en postres lácteos y flanes y del 37,7% en leche en polvo.
El rubro de leche fluida refrigerada perdió 7,2% y la no refrigerada un 11,3%. Yogures bajó 16% y los quesos perdieron ventas de manera dispar según el tipo, con un pico de baja del 24,2% en los de pasta muy blanda.