El próximo jueves 9 de enero, Argentina enfrentará un importante compromiso financiero: el pago de USD 4.704 millones en intereses y capital de la deuda reestructurada en 2020 bajo la gestión de Martín Guzmán. Esta cifra incluye tanto los intereses como el capital correspondiente a los bonos reestructurados.
El país cumplirá con el pago “en tiempo y forma”. De los 4.704 millones de dólares, una parte será abonada con ahorros acumulados. “Argentina paga con dinero que el Banco Central estuvo ahorrando durante todo este tiempo. Ese dinero fue depositado dentro de una cuenta en el Bank of New York Mellon (BNY)”,
Además, Argentina compró dólares durante el último trimestre de 2024, una medida que también contribuirá a la cobertura del vencimiento. Sin embargo, todo el monto no será cubierto solo con reservas. El país recurrirá a un préstamo de corto plazo con al menos tres bancos internacionales: Citigroup, Morgan Stanley y J.P. Morgan.
Este préstamo se realizará a través del mecanismo financiero conocido como repo, operación en la que se entregan activos como garantía a cambio de financiamiento. En este caso, se utilizarán tanto reservas de oro como nuevos Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (BOPREAL) emitidos como colaterales para asegurar el crédito.
Este pago, que se realiza sin reestructuraciones adicionales, será considerado una señal de estabilidad. El hecho de que se cumpla con el vencimiento es positivo, ya que despeja parte de la incertidumbre financiera para los próximos meses. Hay que recordar que Argentina deberá enfrentar en 2025 el pago de USD 24.000 millones de deuda pública con vencimiento en moneda extranjera, situación que causa preocupación en los mercados.
“Se supone que después del pago de la deuda se va a despejar mucho el panorama financiero y cambiario del país para el resto del 2025”. La atención estará puesta en los próximos pagos, especialmente en julio, cuando se espera otro vencimiento de aproximadamente USD 4.000 millones.