Una de las industrias a las que el Gobierno de Javier Milei le pone fichas para conseguir el éxito de su esquema económico es la productora de litio. Las dólares que puede generar la exportación de este material podría ser fundamental para reforzar las reservas del Banco Central y ayudar a alcanzar las metas que se pudo la gestión libertaria.
Este aporte salteño ayuda al sueño de posicionar a Argentina como uno de los principales vendedores en el mundo y partió desde el salar Centenario Ratonas; es la primera vez que se envía una carga desde este lugar. De no tener proyectos activos, Salta pasará a convertirse en los próximos meses en la principal exportadora del país.
La confirmación del despacho de este lote inicial fue el resultado de una inversión cercana a los 800 millones dólares que hizo la empresa francesa Eramine que inauguró sus labores hace unos pocos meses, según información que pudo recabar el medio Más Energía. La planta tiene una capacidad de producción de 24.000 toneladas que se extenderá a las 75.000 toneladas en los próximos años.
“Haber alcanzado este hito marca el inicio de una nueva etapa para nuestra empresa y para la provincia. Seguimos avanzando en el desarrollo de un modelo industrial sustentable y rentable, con altos estándares de seguridad y tecnología de vanguardia”, destacó Alejandro Moro, CEO de la compañía inversora.
Otra promesas en Salta
Dentro de la potencialidad que tiene la provincia de Salta se puede nombrar al proyecto de Posco que promete una capacidad de producción de 25.000 toneladas de mineral. La explotación de la empresa surcoreana se desarrolla en el salar de Hombre Muerto y tiene también una planta de hidróxido de litio; que es la única en el país.
Las mismas expectativas genera la iniciativa salteña que dieron a conocer como Mariana y que lleva adelante la empresa china Ganfeng. Se espera que esta compañía alcance la generación de 20.000 toneladas del metal.
El aporte para este año que surge del proyecto Rincón, en Río Tinto, es pequeño, ya que representa unas 3.000 toneladas del metal. Aun así, con la promesa de una inversión de US$2.500, abren la esperanza de llegar a generar unas 60.000 en un plazo de tres años.
“En 2023 vimos un crecimiento de la producción de litio del 30%. Los datos preliminares del 2024 hablan de un crecimiento del 60%. Y en 2025 vamos a estar, con facilidad, por arriba del 50%. Esto tiene que ver con las inauguraciones de proyectos nuevos”, señalaron desde Cámara Argentina Empresas Mineras (CAEM).
Más allá de que las expectativas son altas, hay que tener en cuenta que la optimización de las plantas son procesos progresivos y llevan tiempo. “Si contabilizamos los tres proyectos que ya estaban en producción y sus ampliaciones en marcha, este año vamos a superar las 100.000 toneladas fácilmente”, explicaron desde la entidad.
Del análisis realizado por la consultora Aleph Energy, surge que se esperan 11 proyectos operativos que están en construcción. Estas iniciativas generarían alrededor de 317.000 toneladas; cinco veces más que el promedio de 2024. Además, hay que tener en cuenta que hay otras 20 planificaciones en etapa de factibilidad y pre factibilidad.